Le pido a la luna, que alumbre tu vida, la mía hace ya tiempo que yace fundida. Con lo que me cuesta querer sólo a ratos, mejor no te quiero y será más barato.
Cansada de ser la triste violinista que está en tu tejado.


1 comentario:

  1. hasta el camino de plata se oxida...
    como las palabras...lo que siente uno es pasajero..
    beso

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